martes, 2 de abril de 2013

Para "mis niños"


23 de abril de 2010


Parece mentira que haya pasado ya una semana. ¡Llevábamos tanto tiempo preparando este Torneo...!
Y es que esta entrada es para vosotros, para “mis niños”, a los que gracias a vosotros me habéis permitido volver a un torneo de debate. ¡No sabéis lo que se sufre siendo formador! ¡Más que como debatiente, os lo garantizo!
¡Formador! Voy como formador. Si, mi querida Paula de Nebrija, los formadores existen y somos reales, tangibles, y estamos para ayudar, guiar, acompañar. La pena es que no podemos sentarnos junto a vosotros, ¡pero lo hacéis tan bien!
Cuando esos lazos de la Pilocracia me preguntaron si estaría dispuesto a capitanear dos equipos de la Universidad Pablo de Olavide no pude resistirme. Lo lamento por la acusación de transfuguismo de “mis otros niños”, los de ETEA, la acusación de herejía de mis amigos Mikel y Telmo, y la acusación de traición de mi amigo David de ICADE. Si, estoy en una universidad pública. Sabéis que hay cierta coña con esto, pero difundir y enseñar los secretos de esta herramienta es por lo que creo que debemos luchar todos.
Y yo me he encontrado con un equipo magnífico, que me han aguantado como héroes todas mis correcciones y que han hecho que me sienta orgulloso (¡claro que si Carmen Diego!). Habéis logrado que me quede ronco, algo que no había conseguido ni la discoteca más ruidosa. Me habéis vuelto a dar la oportunidad de volver, de enseñar, de veros crecer. ¡Y es que sois una edición de vosotros mismos perfeccionada! Porque en cinco meses habéis crecido tanto....¡ahora es muy difícil ganaros! Fuimos equipo revelación, y yo creo que podemos ser campeón, pero ya sabéis, no nos obsesionemos con la victoria. En el debate juega el fondo y la forma, pero también la suerte, algo que no se puede entrenar. Sigamos así, queriendo ser siempre un poquito mejores. Gracias Ana, gracias “mini”, gracias Carlos, gracias Antuan, gracias Carmen Diego, gracias Nerea, gracias Pilo, gracias “Arti” y gracias al resto de miembros del Club de debate de la UPO.
Gracias por confiar en mi, pero sobretodo gracias por confiar en vosotros mismos. Me habéis devuelto la sonrisa, me habéis dejado ronco y, lo admito, me hicisteis llorar de satisfacción.
Espero que esto no termine aquí, porque por encima de todos no os lleváis la experiencia de un viejo capitán, sino la de un amigo que lo será para siempre.
Uno de vosotros me dijo: “Te has encontrado con un equipo muy ambicioso, “capi”. Lo sé chicos. Y eso no es malo. Pero efectivamente querido Arteaga, “todo llegará...”.
Porque vosotros sois mis ocho trofeos y me olvido del resto, porque debemos seguir trabajando y creciendo, porque tenemos que continuar inventando y porque tengamos fe en esto, por todo ello, muchas muchas gracias.

No hay comentarios:

Publicar un comentario